Imaginemos como hizo Jesús sus Giros para repetirlos
El siendo uno con el Padre, debió realizar un giro de una manera perfectamente y amorosa:
- Su giro partieron desde su unidad con el Padre - cada movimiento nació del amor infinito entre las Tres Personas Divinas.
- Abarcando simultáneamente:
- Todo lo creado, desde el más pequeño átomo hasta el universo entero.
- Todos los actos de amor de todas las criaturas.
- Cada latido, respiración y movimiento de cada ser humano.
- Todo el tiempo: pasado, presente y futuro
- En cada giro:
- Reparó por todo lo que no corresponde al amor del Padre
- Multiplicado infinitamente cada acto de amor de las criaturas.
- Transformando todo en amor puro y divino.
- Devolviendo todo de vuelta al Padre como ofrenda perfecta.
- Su giro fue un acto continuo de:
- Glorificación perfecta al Padre
- Agradecimiento infinito
- Amor correspondido plenamente
- Unidad absoluta con la Voluntad Divina
Por eso, cuando hacemos un giro, debemos intentar hacerlo unidos a Jesús, dejando que Él mismo gire en nosotros, porque solo así nuestro pequeño acto puede adquirir valor infinito al ser hecho en Su Persona.
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