"Hija mía, ámame, ámame, he nacido para amar y para ser amado, y para obrar como Dios mi nacimiento es universal, no habría obrado como Dios si no hubiese renacido en modo universal, de modo que todos pueden decir con los hechos: "El Celestial niño ha nacido para mí, es mío, y es tan verdadero que ya lo poseo."
Mi Amor quedaría obstaculizado si no hubiese podido renacer en todos, mi Potencia limitada, mi Inmensidad restringida si no fuese universal mi nacimiento, y no es maravilla, conforme mi Divinidad llenaba Cielos y tierra, así incorporándose en mi pequeña Humanidad, la multiplicaba y bilocaba de modo que me hacía renacer en todos y en cada uno". Volumen 31 Diciembre 25, 1932
- Inicie sesión para enviar comentarios